The Rolling Stones
- magazine : Los Inrockuptibles
- numero : 4000 - 2016
- date : 02 février 2016
- catégorie : Culture & arts
Sommaire
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Blues express
En 1962, la banda se forma alrededor de un mismo amor por el blues
estadounidense, introducido en tierras británicas por Alexis Korner. Los dos
primeros álbumes, que salieron al mismo tiempo en Gran Bretaña y en los
Estados Unidos, llevan esa marca. -
Pistas de despegue
A partir de su tercer álbum, los Rolling Stones abandonan los covers para
desplegar una composición deslumbrante. Con dos discos fundadores, la banda
ya anuncia el nacimiento de la psicodelia. -
Los años luz
En 1966 y 1967, en medio de disgustos judiciales, los Stones intentan una
escapada por territorios pop y psicodélicos que muchos, incluidos ellos
mismos, consideran un callejón sin salida. Los álbumes Between the Buttons y
Their Satanic Majesties Request, en los que Brian Jones hace brillar sus
últimas llamas, conservan su brillo. -
Una nueva dirección
Los Stones de los años 1968-1969, ya bajados de su arcoíris y llevados por las
revueltas urbanas, van a beber de las fuentes del blues para reinventarse
nuevamente. Una fórmula mágica y triunfadora en los álbumes Beggars Banquet
y Let It Bleed, pero trágica y definitiva para Brian Jones. -
Las invasiones bárbaras
En 1971 y 1972, los ingleses se imponen como la más grande banda de rock
estadounidense con dos discos en espejo: la loca bacanal de Sticky Fingers y el
desencantado Exile on Main Street. -
Rock’n’roll circus
Entre 1973 y 1976, los Rolling Stones forman un circo itinerante: dan recitales
en todo el mundo, arrastrando tras sus pasos una letanía de polémicas.
La música, por su parte, queda en un segundo lugar. -
Salvados por la música disco
Los Stones, burlados por los punks que, sin embargo, les deben mucho, se toman
revancha poniendo un pie en territorio enemigo: la música disco. Con “Miss
You” renuevan la máquina de grandes éxitos, y el álbum Some Girls de 1978
se revela como una verdadera joya. Dos años más tarde, Emotional Rescue se
lleva también todos los premios pero con menos pompas. -
El crepúsculo de los dioses
Los ochenta marcan una nueva etapa: la banda, carente de inspiración y
sumida en una serie de peleas internas, parece funcionar solo por el recuerdo
de un pasado glorioso, del que siguen sacando partido. -
Delitos públicos
Unos diez discos en vivo fueron marcando la carrera de los Stones, del más
incendiario y lujurioso al más predecible y frío. Testimonios en acción y en directo
que no siempre estuvieron a la altura de la reputación de la banda de estadios más
grande del mundo. -
Riffs alternativos
Covers, versiones, composiciones originales olvidadas y
grabaciones en vivo dan lugar desde hace décadas a la
felicidad y la fortuna de los piratas. Cómo constituir una
discografía paralela de los Stones que podría rivalizar con
la oficial. -
Piedras preciosas
Una selección cronológica de diez canciones desconocidas de los Rolling
Stones que merecen una escucha dedicada. -
Mick Jagger
Ningún otro cantante inglés supo expresar tan bien las promesas de goce
de la música negra como este Dorian Gray eléctrico que atraviesa las
décadas sin acusar recibo del paso del tiempo. -
Keith Richards
Sobreviviente de mil batallas, mito viviente del rock, esculpió riff inmortales
preocupándose tanto por el sonido como por los silencios de su guitarra endiablada. -
Brian Jones
Muerto trágicamente en 1969 en un confuso episodio, el fundador de los
Rolling Stones vivió varias vidas en tan solo veintisiete años en la Tierra.
Tras haber sido echado de la banda, ausencia que benefició a la dupla Jagger-
Richards, Jones comenzó su acelerado e indefectible descenso a los infiernos. -
Ron Wood
Guitarrista desde 1975, nació para ser un
Rolling Stone. -
Charlie Watts
Baterista de los Rolling Stones desde 1963, este sólido y discreto artesano del ritmo juró
fidelidad a la banda hasta el último día. -
Bill Wyman
El bajista de los Stones desde 1962
llevó una vida simple de estrella de
rock y con la misma simpleza dejó la
banda en 1993. -
Mick Taylor
Reemplazante de improviso de Brian Jones en 1969, este guitarrista dotado pero
discreto nunca existió realmente frente a los dos líderes. Abandonó el barco al cabo de
cinco años y se llevó con él algo de la llama stoniana.